domingo, 31 de agosto de 2008

213. Regreso al 'Titanic'

En el siglo XXIII se han puesto de moda los viajes en el tiempo. Sobre todo al Titanic.

Es en los momentos inmediatamente anteriores al hundimiento cuando la afluencia de pasajeros es mayor. Lógicamente, el precio también es mayor. Sin embargo, no conviene dejarse engañar: junto a los viajeros que se pueden permitir un regreso a su época en el último minuto, también hay gente que sólo tenía dinero para pagar el billete de ida.

sábado, 30 de agosto de 2008

212. Como Terminator III (ciencia-ficción total)

—Aprobado —dice el cliente.

El director creativo no entiende nada. En los años que lleva como responsable de la creatividad de Futuratrix, nunca (hasta ahora) le habían aprobado un guión en la primera presentación. Es más: nunca (hasta ahora) le habían aprobado un guión antes de presentarlo.

A un gesto del cliente, uno de sus ayudantes introduce un deuvedé en el lector de deuvedés.

En la pantalla aparece el spot, rodado, montado y sonorizado. En las versiones de treinta, veinte y diez segundos. Castellano y catalán.

—Nos lo acaban de mandar del futuro —comenta el cliente—. Como veis, ha habido algunos pequeños cambios, pero ya habrá tiempo para hablar de ellos.

viernes, 29 de agosto de 2008

211. Como Terminator II

El excedente de lejía se ha agotado. Sin embargo, en el pasado sigue habiendo una gran demanda. Por eso, el fabricante alemán decide reanudar la producción. Pero ¿de dónde va a sacar la mano de obra? Hace unos años despidió a más de setecientos empleados; podría volverlos a contratar, o buscarse otros, pero la sola idea le produce urticaria (la gripe del siglo XXIII). Además, no quiere volver a enfrentarse a los sindicatos: desde que clonaron a Marx se han vuelto muy intratables.

Al final, adopta la mejor solución posible: abrir una fábrica de replicantes en el siglo XVIII.

jueves, 28 de agosto de 2008

210. Como Terminator

A quienes tenemos un pasado

Futuratrix llega puntual: dos segundos después de que se produzca el accidente. Por supuesto, podía haber llegado a tiempo para evitarlo; pero entonces, ¿qué gracia tendría?


En el siglo XXIII la gente no se mancha la ropa. Ni los manteles, ni las cortinas, ni las alfombras. Usan una clase de tejido que repele todo tipo de sustancias y, además, tiene manga ancha para conectarse a la Red (el tejido de tejidos).


Todos los comensales han recibido lo suyo. Si no ha sido una camisa ha sido una falda o, si no, un pantalón. Por no hablar del mantel. Y es que las manchas de vino se quitan muy mal: eso lo sabe todo el mundo. Lo que no sabe nadie es de dónde ha salido esa chica sexy y extravagante.


En el siglo XXIII la lejía ha quedado completamente obsoleta. Pero eso lo sabemos ahora. (Dos años atrás, la obsolescencia de la lejía sólo existía en las novelículas de ciencia-ficción.) Un fabricante alemán hizo mal los cálculos y aún le queda mucho producto en stock. Ahora ha decidido mandar a una cyborg al pasado para que promocione su lejía entre las amas de casa españolas.

miércoles, 27 de agosto de 2008

209. El lobo y Pedro (versión sideral)

Pedro fue abducido y tuvo que comenzar una nueva vida en Ganímedes de Abajo. Tras desempeñar varios oficios (como minero sideral, deshollinador de volcanes y conejillo de andrómedas, entre otros), acabó dedicándose a lo que mejor sabía hacer: cuidar ovejas. Ovejas vaporosas, pero ovejas, al fin y al cabo.

Un día que estaba mortalmente aburrido, Pedro gritó aquello de:

—¡Que viene el lobo deletéreo!

martes, 26 de agosto de 2008

lunes, 25 de agosto de 2008

207. El lobo y Pedro

Después de gritar en tantas ocasiones que viene el lobo, que viene el lobo, ya no debe de quedar nadie en el pueblo que se trague esa bola. El problema es que esta vez es verdad: el lobo se dirige decidido hacia el rebaño. Pedro no sabe qué hacer: podría probar suerte; quizás aún quede alguna persona confiada en el pueblo.

El lobo está ya muy cerca de las ovejas periféricas. Realmente, a estas alturas no le va a creer ni el tonto Simón. Pero tiene que tomar una decisión rápida. Y la toma:

—¡Que vienen los extraterrestres!

domingo, 24 de agosto de 2008

206. Especular

Odiseo está ocioso. Su creatividad ya no está orientada a proporcionarle la victoria o la supervivencia. Ahora está orientada a pasar el rato. Por ejemplo, lleva dos horas dándole vueltas a otra manera de acabar con Medusa. El recurso del escudo reflectante está muy bien, y se puede mantener; pero, si él hubiera estado en la piel de Perseo, le habría arrancado un ojo (siempre mirándola a través del reflejo en el escudo). En realidad, no le habría arrancado un ojo: solamente habría tirado de él hasta hacerlo saltar de su órbita, pero sin arrancarlo del nervio óptico. (Nota mental: saltar de un puente atado a una cuerda; podría ser un pasatiempo interesante para gente ociosa como él.) Entonces, habría dirigido el ojo hacia el rostro de la Gorgona, a ver qué pasaba. De todas formas, esta acción requiere una pericia que Odiseo no posee. Además, Medusa está muerta.

Odiseo está ocioso.

sábado, 23 de agosto de 2008

205. En ningún sitio como en Kansas

Cuando Dorothy despertó, el Hombre de Hojalata, el Espantapájaros y el León todavía estaban allí.

viernes, 22 de agosto de 2008

204. Anuario

A V.F.

En los institutos españoles de educación secundaria no suele haber bailes de graduación ni anuarios ni ninguna de estas milongas a las que nos tiene acostumbrados el cine estadounidense. Sin embargo, no debería sorprendernos que, al igual que ha sucedido con la fiesta de Halloween y otras tradiciones anglosajonas, los bailes de graduación, los anuarios y demás milongas acaben imponiéndose en nuestro país. Por eso, desde nuestro partido proponemos y, de paso, exigimos, que el Gobierno plantee y promueva y, si es preciso, imponga una reforma en la Ley de Educación para que los bailes de graduación, los anuarios y todas estas milongas queden expresamente prohibidas en los institutos de educación secundaria de toda España. Al margen de las consideraciones seudopatrióticas que pudiera sugerir nuestra afinidad política con formaciones más manifiestamente folclóricas, la causa de esta propuesta no es otra que evitar, atajándola de raíz, cualquier Masacre del Baile de Graduación o Cadena de Crímenes de la Fiesta de Reencuentro, cometidas invariablemente por el alumno o ex alumno al que nadie sabía qué cojones escribirle en el apartado de firmas del consabido anuario.

jueves, 21 de agosto de 2008

203. Partido benéfico

Toreros contra periodistas. El portero de los periodistas retransmite el partido. Unos altavoces difunden la retransmisión para todo el estadio. El partido está reñido. Tres a tres. Falta menos de un minuto para el final.

El locutor hace un comentario basado en un juego de palabras de origen taurino. Los periodistas se detienen, maravillados ante la inventiva de su guardameta. Algunos aplauden. El portero alza una mano. El gesto también es de origen taurino. Los toreros aprovechan la relajación de sus contrincantes para marcar su cuarto gol. Después de noventa minutos de locuacidad incesante, el portero se ha quedado mudo.

El público, en cambio, parece haber recuperado la voz. Ahora se oyen. Ahora se harán oír. Todos a una, piden las dos orejas y el rabo.

miércoles, 20 de agosto de 2008

202. El book

Está cansado. Cansado de amores de madre, de vanessas y macarenas en letras góticas mayúsculas, de navajas y corazones y calaveras y dragones. Después de ocho años, ha llegado el momento de moverse. Con su experiencia, no le será difícil encontrar trabajo. O sí. Porque (ahí afuera) el mundo ha cambiado. Ahora buscan sobre todo originalidad. Y él no ha hecho otra cosa que amores de madre, que vanessas y macarenas en letras góticas mayúsculas, que navajas y corazones y calaveras y dragones. Después de ocho años, debe empezar de cero. Debe prepararse un book. Pero un book con piezas originales. Desempolvará su carpeta con sus dibujos y saldrá a la calle. Aunque eso no basta. El book en sí también debe ser original. Pero ¿cómo? Tal vez… En lugar de las típicas fotos, puede poner los tatuajes originales (en todos los sentidos). Un book con páginas de piel. Sí, ¿por qué no?

Empezará esta misma noche.

martes, 19 de agosto de 2008

201. Los inocentes

En el amanecer del 28 de diciembre, la Rambla de Catalunya está casi vacía. Sólo hay una mujer joven, esperando innecesariamente a que el semáforo de peatones le dé vía libre. Se enciende el hombrecito verde, pero la joven no se mueve. Cae desplomada al suelo. Pegado a su espalda hay un monigote de papel blanco.


Algo más tarde. Un detective introduce un monigote de papel blanco en una bolsita plana de plástico transparente. Frente a él hay una puerta con la silueta esquemática de una figura con pantalones. A sus pies yace el dueño del bar. No hay señales visibles de violencia.


A lo largo de la mañana, en distintos puntos de Barcelona se suceden varias muertes de similares características. Hombres y mujeres de diferente edad, raza y condición. Lo único que tienen en común es la forma súbita de morir. La ausencia de testigos. Y el monigote de papel blanco pegado a la espalda.


En el laboratorio forense, al mediodía. Sobre una mesa hay treinta y ocho bolsitas planas de plástico transparente. Cada una de ellas contiene un monigote de papel blanco. Alguien se pregunta cómo puede existir gente así. Cómo pueden hacerle eso, con lo que le había costado conseguir la semana entera de vacaciones.


Hay muchas personas que se han quedado sin vacaciones. Algunas, para siempre. No hay pistas. Tiene que tratarse de una banda organizada. Muy organizada. Posiblemente una secta. El Día de los Inocentes. La matanza de los inocentes. Herodes. Todo eso. No han muerto bebés. Tal vez sea una reacción contra la conmemoración bufa de un episodio monstruoso. Es sólo una conjetura. No hay pistas.


En el laboratorio forense, a las cinco y media de la tarde. Sobre la mesa hay sesenta y cinco bolsitas planas de plástico transparente. Están vacías.


El sol se pone más allá del Llobregat. Las luces de Barcelona se encienden como mecheros en un concierto multitudinario. En lo alto del Tibidabo, hay una hilera formada por un millón de monigotes de papel blanco. Aunque sopla un viento fuerte, se mantienen firmes como soldados de un ejército altamente disciplinado.

lunes, 18 de agosto de 2008

200. Golpe en la Pequeña China

Cuando golpeaba su mejilla izquierda con la palma de mi mano derecha, ella gritaba:

—¡Mi hija!

Cuando golpeaba su mejilla derecha con el dorso de mi mano derecha, ella gritaba:

—¡Mi hermana!

Era un curioso reflejo de características pavlovianas cuyo origen me resultaba desconocido.

En cierta ocasión, se me ocurrió introducir una ligera variante: la golpeé de las dos formas (derecho y revés) de manera seguida.

—¡Tu puta madre! —gritó al tiempo que me propinaba un puñetazo en la maltrecha nariz.

domingo, 17 de agosto de 2008

199. La dieta IV

La mascota de los neumáticos ha vuelto a engordar.

—No lo entiendo, porque casi no como.

Sea cual sea la causa, lo cierto es que empezó a ganar peso el día en que la dejó el gigante de los guisantes.

Aquel mismo día, por cierto, se compró una bomba para hinchar ruedas.

sábado, 16 de agosto de 2008

198. Vacaciones en Obtuso II

Sigo dándole vueltas. Se me acaba de ocurrir que tal vez los gamusinos no existen. Ni los pasodobles ni la canción del negro que tenía no sé qué. Ni siquiera Obtuso. Quizás todo esto no sea más que un sueño remoto. O quizás ni eso. Puede que sean recuerdos prefabricados. Archivos de memoria artificial importados al disco duro de un replicante.

viernes, 15 de agosto de 2008

197. La dieta III

A la mascota no le ha hecho ninguna gracia que la empresa de neumáticos siga explotando su antigua imagen de gordura aerofágica. Y ha llegado a efectuar unas duras declaraciones al respecto, pero no ha tardado en retractarse:

—No he debido escupir en la mano que me da de comer. Aunque ahora coma bastante menos.

jueves, 14 de agosto de 2008

196. Tantas cosas que no te dije

Hay tantas cosas que no te dije. Ahora ya es tarde. Si pudiera volver atrás…, pero no: ése es un ejercicio mental absurdo y doloroso. Además, si pudiera volver atrás, volvería a hacer lo mismo. Son tantas y tantas las cosas que no te dije. Pero es que no tenía tiempo. Nos pasábamos el día follando.

miércoles, 13 de agosto de 2008

195. La dieta II

La mascota ha adelgazado tanto que está irreconocible. Además, se le ha agriado el carácter. Ahora no le gusta que le recuerden su antigua gordura neumática. Por eso ha demandado a la RAE.

martes, 12 de agosto de 2008

194. ¿Por qué me rugen las tripas?

Me están recordando que vengo de las cavernas. Su rugido reproduce el del felino de dientes de sable o como quiera que se llame esa fiera que olvidé hace tiempo. Esa fiera que cazaba para satisfacer una necesidad tan básica como es el alimento, antes de empezar el lento ascenso por la pirámide de las necesidades de un tal Maslow.

lunes, 11 de agosto de 2008

domingo, 10 de agosto de 2008

192. La dieta

La popular mascota de una empresa de neumáticos se ha puesto a dieta. En la puerta de su nevera ha colocado una fotocopia del diccionario de la RAE: es la página donde figura la palabra michelín.

sábado, 9 de agosto de 2008

191. Mensaje de Dios

Dios es mi personaje de ficción favorito.

HOMER J. SIMPSON

Dios ha intentado enviarme un mensaje. Pesaba mucho y le ha rebotado.

viernes, 8 de agosto de 2008

190. Vacaciones en Obtuso

Tengo un recuerdo vago, impreciso, de las largas tardes sin siesta, las noches de sueño interrumpido por culpa del bingo al aire libre y los pasodobles y una canción de alguien que le preguntaba a su madre sobre algo que tenía un negro y no sabía lo que era, y los madrugones forzosos por culpa de los disparos de los cazadores de gamusinos. Fue hace mucho tiempo y, aparte de lo dicho, sólo recuerdo que el lugar se llamaba Obtuso. Pero no estoy seguro de que se escriba así. Ni siquiera sé si Obtuso es un pueblo, un barrio o un planeta.

miércoles, 6 de agosto de 2008

188. Selección nacional

Reconozcámoslo: nuestros jugadores son el hazmerreír del mundial, pero… ¡qué bien cantan el himno nacional los jodidos!

martes, 5 de agosto de 2008

lunes, 4 de agosto de 2008

186. Un anuncio de seguros

A E.P.

Una mujer y un hombre hacen el amor en una cama de matrimonio.

Se oye el ruido de un coche aparcando en un terreno de grava.

La mujer y el hombre se separan, como impelidos por un resorte.

El hombre se levanta. Sigilosamente, se acerca a la ventana. Se asoma con precaución.

—¿Es un todoterreno negro? —pregunta la mujer, con un nudo en la garganta.
—No.

La mujer deja escapar un suspiro de alivio.

El hombre vuelve a la cama. Le tiemblan las piernas.

Segundos después, la mujer y el hombre están haciendo el amor de nuevo. Entretanto, oímos una voz en off:

—Si durante unos días no puedes disponer de tu coche, en Summerthur te dejamos otro.

domingo, 3 de agosto de 2008

185. El hombre rana II

Un estudio con murciélagos machos ha demostrado que la capacidad cerebral de estos animales es inversamente proporcional al tamaño de sus testículos.

El pene del calamar gigante mide dos metros y medio.

—Eso lo explica todo —reflexiona el Doctor Octopus.

sábado, 2 de agosto de 2008

184. Insectos

Odio los insectos: las moscas, los mosquitos, las hormigas, las cucarachas, las abejas, las avispas, las pulgas, las polillas, las chinches, las mariposas, los saltamontes, los tábanos, los escarabajos, las luciérnagas, las mariquitas, las cigarras, los grillos, las libélulas, los piojos, las ladillas… También odiaba las arañas, hasta que alguien me dijo que no son insectos.

viernes, 1 de agosto de 2008

183. León

El León ya no le tiene miedo a nada. Ahora practica todo tipo de deportes de riesgo; y cuanto mayor sea el riesgo, mejor.

El otro día se fue a hacer puenting, pero calculó mal: la cola era demasiado corta.