Un tren descarrila. Contra todo pronóstico, continúa su trayecto sin incidentes.Cunde el ejemplo y se arma la de Dios.
Qué buena reflexión. Y el "cunde el ejemplo y se arma la de Dios" tiene multitud de lecturas. Es divertido ver cuántos y qué diferentes mensajes da.Un beso
a que llamamos incidente, si descarrila y no sucede nada, quizás cogió la vía de la sin incidentes.
Ahora es un tren libre. Yo también descarrilé ;)
La de Dios se arma siempre, descarrile o no descarrile. Pero debe ser espectacular ver el tren a 220 km/h por la autopista.
Alís: Me alegra que te haya cundido el cuento. Beso.Ex-compi: Es un sincidente.Claudia: ¿Me lo cuentas en privado? ;-)Miguel: Pues sí. Antes de que pasen todos los vagones el radar ya ha disparado la foto.
Qué buena reflexión.
ResponderEliminarY el "cunde el ejemplo y se arma la de Dios" tiene multitud de lecturas. Es divertido ver cuántos y qué diferentes mensajes da.
Un beso
a que llamamos incidente, si descarrila y no sucede nada, quizás cogió la vía de la sin incidentes.
ResponderEliminarAhora es un tren libre. Yo también descarrilé ;)
ResponderEliminarLa de Dios se arma siempre, descarrile o no descarrile. Pero debe ser espectacular ver el tren a 220 km/h por la autopista.
ResponderEliminarAlís: Me alegra que te haya cundido el cuento. Beso.
ResponderEliminarEx-compi: Es un sincidente.
Claudia: ¿Me lo cuentas en privado? ;-)
Miguel: Pues sí. Antes de que pasen todos los vagones el radar ya ha disparado la foto.