Nada más llegar a Manhattan, el monje se arrepiente. No tenía que haber tomado una decisión como aquélla de manera tan precipitada. Debía haberla meditado más.
Pues parece que no fue tan mala decisión... Perfecta ironía.Un beso
Pues parece que no fue tan mala decisión...
ResponderEliminarPerfecta ironía.
Un beso