Por una vez, los invasores alienígenas no pretenden destruir la Casa Blanca. No les llega el presupuesto.
—Un momento. Estás apuntando al Ajuntament.
—¿Pero qué dices? Estoy apuntando al Palau de la Generalitat. El Ajuntament es el que está enfrente.
—¿Estás seguro?
—Al setenta por ciento.
—Ah, bueno. En ese caso, adelante. Dispara.
—¿Y si destruimos los dos?
—¿Los dos? ¡Pero si a duras penas nos alcanza para un edificio!
—Ay, Señor… ¿Cómo podemos ser tan cutres?
viernes, 16 de julio de 2010
897. Diada Nacional
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1 comentario:
Pues sí que son cutres, sí. Pero ojalá todos los invasores fueran igual de cutres o más...
Un beso
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