La azafata tiene miedo a volar. Para que se le pase, debe acostarse con el comandante del próximo vuelo. Si consigue que se sienta segura, el miedo a volar con esta persona se esfuma.
—¿Tienes miedo?
—Un poco —confiesa la comandante.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
pues al baño, venga.
Dos miedos haciendo el amor... puede ser fantástico o el peor de los fracasos. En este caso, no quisiera ir en ese vuelo.
Muy bueno, Al
Besos
Publicar un comentario