Ha pasado un año y el lobo no ha vuelto. En cambio, los hermanos del tercer cerdito no se van ni a la de tres. Cada vez que intenta sacar el tema, siempre con indirectas, le salen con que el lobo puede venir de un momento a otro.
—A lo mejor ya está dentro —dice el segundo cerdito.
—¡Eso! —salta el primer cerdito—. Como en aquella película… ¿Cómo se llamaba? ¿El inquilino impreciso?
—No, El residente inexacto.
El tercer cerdito está a punto de replicar, cuando oyen un ruido procedente del cuarto de baño.
—Es él —susurra el primer cerdito.
Es un ruido monótono, chirriante.
—No es él —dice el tercer cerdito—. Es la okupa de la cigarra.
miércoles, 29 de octubre de 2008
272. El tercer cerdito III
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2 comentarios:
Me parto.
Lo del cerdito era una alusión al comentario o viceversa?
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