martes, 2 de diciembre de 2008

306. El sombrero

Ayer fui al teatro. Delante mío se había sentado una señora con un sombrero. Era uno de esos sombreros que parecen una mezcla de centro floral, puesto de frutas y retrato de Arcimboldo después de una paliza. Era un sombrero bonito, pero me tapaba la visión del escenario; incómoda situación que me obligó a preguntarle a la señora si tenía la amabilidad de quitárselo. Ella no sólo tuvo la amabilidad de quitárselo, sino que además me pidió disculpas. Por favor, le dije yo.

La obra estuvo bien, pero me gustó más el sombrero.

5 comentarios:

Vigi dijo...

siempre he estado siguiendo tu blog, me parece genial.... me encanta

6 dijo...

Es que últimente hacen unos sombreros... y unas obras...

Alberto Ramos dijo...

Vigi, ¡gracias!

6, veo que me entiendes.

claudia paredes dijo...

Un sombrero para dar de comer, por lo que cuentas. Esos que tienen de todo, menos el plato.

Alberto Ramos dijo...

Tienen hasta copa.