Eva se encuentra recostada a la sombra del Árbol de la Ciencia. Le cae una manzana en la cabeza. La recoge, la mira, la sopesa. Está a punto de formular la ley de la gravedad, cuando un angelote que pasa revoloteando le desbarata la teoría.
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2 comentarios:
Lección: ningún ángel te dirá qué hacer.
Es cierto, no había caído.
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